Cuando escuchamos el término «pronóstico», generalmente nos viene a la mente la idea de predecir acciones o eventos futuros para tomar decisiones. Este término se puede utilizar en el campo de la planificación empresarial o en el nivel de la contabilidad empresarial y es un factor de gran importancia. Por tanto, hoy veremos qué es la previsión contable y qué tipos hay.
¿Qué es la previsión en contabilidad?
Para evitar problemas contables y financieros en una empresa, es muy importante que la planificación se haga de acuerdo a posibles escenarios futuros. De esta forma, el progreso y el éxito del negocio no se verán obstaculizados por situaciones de emergencia.
En contabilidad, el pronóstico consiste en predecir montos o cifras en los estados financieros que pueden afectar el patrimonio de una entidad, estos valores deben tener una alta tasa de probabilidad. En general, estas previsiones se basan en estadísticas contables de periodos anteriores de la empresa.

Los pronósticos son muy importantes porque permiten anticipar fluctuaciones y factores que pueden afectar las finanzas de la empresa, especialmente en los presupuestos. De esta forma, se puede realizar una planificación eficaz de los proyectos y para la consecución de objetivos.
Tipos de previsión en contabilidad
En cualquier negocio e incluso en las pequeñas empresas, la previsión es muy importante en la planificación de objetivos a largo plazo. Y hay tres tipos de pronósticos que son fundamentales en contabilidad.
Previsión de costes
Este tipo de pronósticos se realizan principalmente en la planificación de los gastos que tendrá la empresa por un nuevo proceso operativo o un nuevo proyecto. Los pronósticos de costos contables le permiten ver de antemano cuándo se producirán los gastos y cómo afectarán los activos comerciales.
Gracias a las previsiones de costes contables, entonces es posible hacer planes de financiación y buscar ingresos que permitan llevar a cabo los proyectos. De esta forma, la previsión de costes te permite predecir, paso a paso, las cifras aproximadas de los gastos que se producirán.
Pronóstico de ingresos
Estos son pronósticos basados en la tendencia del mercado, las ventas y las inversiones que predicen cuánto dinero recibirá la empresa. La previsión de los activos de la empresa ayudará a planificar cómo se financiarán ciertos gastos futuros o cómo se invertirán los beneficios excedentes.

En muchos casos, los pronósticos de ingresos son fáciles de crear cuando las condiciones de venta son estables y recurrentes en mercados estables. Pero, en otros casos, pueden ser muy difíciles de predecir, especialmente cuando las cuentas presupuestarias son bastante ajustadas.
Previsión de mercado
Son predicciones más amplias, que incluyen los ingresos y gastos probables derivados de los cambios en el mercado y cómo estos afectan el patrimonio del negocio. Estos pronósticos pueden reflejarse, por ejemplo, en aumentos de las tasas de interés, cambios en la tecnología, temporadas de ventas y muchos otros factores.
Ejemplo de previsión contable
De lo que hemos aprendido antes, vemos que los pronósticos deben ser números exactos que nos permitan pronosticar acciones y realizar una planificación eficaz. Estos pronósticos deben reflejarse claramente en los libros de contabilidad, como el efectivo y los libros bancarios. Veamos un ejemplo de un pronóstico contable.
Un cliente está a punto de cerrar por falta de actividad en el mercado. Existe una alta probabilidad de que no realice el pago correspondiente a nuestra empresa antes del cierre. Suponiendo que la deuda pendiente sea de $ 1000, esta cantidad sería un pronóstico que debe reflejarse y registrarse en las cuentas.
Aunque no hay certeza de que no se vaya a realizar el pago, la probabilidad es muy alta y por tanto se debe crear una previsión. Luego, se revisará si esta previsión se ha realizado efectivamente para llevar a cabo las acciones adeudadas respecto de los activos y pasivos en las cuentas.
Sin duda, la previsión es un aspecto de gran importancia dentro de la actividad contable de las empresas. Constituyen una parte importante de la información contable para la toma de decisiones dentro de la empresa. Y por tanto, son un factor fundamental en la consecución de las metas y objetivos a medio y largo plazo marcados por la empresa.
