Los monitores y televisores de hoy, como los televisores inteligentes que difieren en HD y 4K, tienen una variedad de niveles en su repertorio de resoluciones. Sin embargo, hasta este punto de avance, debieron pasar algunas décadas durante las cuales tener un televisor en casa no era nada nuevo. Nuestra percepción de lo que es nuevo o viejo se ha mantenido y, junto con esto, nuestra visión se ha adaptado a los desarrollos recientes en tecnología. Uno de ellos es la frecuencia de actualización de diferentes dispositivos de reproducción de video.
Lo crea o no, en estas pantallas y televisores se produce un fenómeno en constante movimiento tanto dentro como fuera. El ojo humano lo detecta pero lo procesa de una manera que no nos damos cuenta, por lo que capturamos el movimiento.
En estas pantallas se transmite información capturada de una forma particular, a esto se le llama persistencia retiniana. Esto lo que hace es una imagen que permanece incrustada en nuestros ojos durante diez segundos, lo que nos permite detectar movimiento y profundidad.
¿Qué es una tasa de frecuencia?
Puede definirse como el número de fotogramas por segundo transmitidos por una pantalla o la velocidad a la que muestra esos fotogramas. La vista del ser humano procesa de diez a doce imágenes separadas por segundos, estas se perciben individualmente. Y esto sucede cuando se reproducen una serie de imágenes con iluminación o luces, el ser humano comienza a percibir minúsculas interrupciones y saltos de unos diez milisegundos o más.
¿Cómo funciona Hz dentro de un monitor?
Básicamente, el Hz en un monitor es la frecuencia de actualización que tiene para cada píxel en la pantalla por segundo. Como se explicó anteriormente, la frecuencia de actualización en un monitor indica la cantidad de veces que se actualiza la imagen en un segundo.
En otras palabras, los Hz en un monitor funcionan como la velocidad de las señales de video, indicando el número de ciclos que completan en un segundo. Cuanto mayor sea el Hz de un monitor, mayor calidad de imagen y resolución puede ofrecer.
¿Cómo afecta la frecuencia de actualización a un televisor?
Una de las cosas más importantes a la hora de comprar un televisor o monitor es la capacidad de frecuencia de actualización. Es decir, los fotogramas por segundo que puede transmitir, ya que muchos dispositivos y consolas requieren estas frecuencias, incluidas películas o servicios de streaming. Esto se debe a que se reproducen sesenta fotogramas por segundo a una velocidad mayor.
Los dispositivos de Smart TV como LG están diseñados actualmente para poder procesar esta cantidad de fotogramas por segundo. Sin embargo, todavía hay muchos televisores más baratos que no reproducen esta cantidad de imágenes. Esto significa que varias plataformas o servicios no están al cien por cien de su capacidad para aprovechar esta experiencia.
En el mundo de los videojuegos o videojuegos, se ha vuelto casi obligatorio disponer de una pantalla o monitor capaz de manejar estas frecuencias. De hecho, las aplicaciones actuales están optimizadas para poder reproducirse y funcionar de esta manera. Por tanto, es recomendable disponer de este tipo de televisores o monitores actuales a la hora de operar estos juegos, ya que optimizan eficazmente su uso.
Los televisores frente a las consolas también son importantes. De hecho, al comprar una consola, vienen con videojuegos que requieren un procesamiento tan alto de imágenes y partículas en la pantalla. Además de cuadros por segundo bastante altos, la mitad de la resolución de un juego se llena con la pantalla y la otra mitad con la consola.
¿De qué sirve tener una buena frecuencia de actualización en un televisor?
Se utiliza para aumentar el rendimiento y la experiencia gráfica al reproducir una película o, en este caso, al utilizar una consola de videojuegos. Su función es que el juego se ejecute de forma fluida y óptima. Hoy en día, muchas películas requieren al menos de 60 a 80 fotogramas por segundo, que es una velocidad de fotogramas promedio en la actualidad.
El ojo humano es capaz de capturar todas estas nuevas tecnologías, lo que hace que las películas o los videojuegos que jugamos parezcan más naturales en comparación con nuestra percepción actual. Sin embargo, a veces, a altas frecuencias de actualización, es menos notorio o perceptible ver la progresión o el retraso de ciertas imágenes en comparación con los números de actualización de pantalla más bajos.
En conclusión, se puede decir que la frecuencia de actualización tanto de una pantalla de TV como de un teléfono inteligente es de vital importancia gráfica. De hecho, lo necesita para leer o mostrar contenido y navegar en VOD o plataformas de video que requieren alta definición sin alterar la visualización de la imagen que se está reproduciendo.
De esta forma, potenciamos nuestra experiencia con las últimas innovaciones en cuanto a gráficos y rendimiento, siendo los monitores actuales la nueva ventana a un mundo lleno de experiencias audiovisuales.
¿Qué tipos de frecuencias de actualización existen?
Aunque la frecuencia de actualización se especifica tanto para monitores como para televisores, la frecuencia de actualización para este último es diferente. Este aspecto es importante cuando desea seleccionar un modelo de televisor. Te contamos aquí qué tipos de tarifas existen:
Frecuencia de actualización nativa
Se tiene en cuenta la velocidad real a la que está funcionando el televisor, que puede ser de 60 Hz y 120 Hz. Actualmente, no se fabrican televisores con una frecuencia de actualización superior a 120 Hz.
Frecuencia de actualización virtual
Esta es la frecuencia de actualización a la que se reproducen las imágenes una vez que se conocen los fotogramas por segundo que contienen. Actualmente se pueden encontrar modelos con 60Hz, 120Hz y 240Hz. También se conoce como frecuencia de movimiento interpolado.
Frecuencia de actualización dinámica
Este tipo de frecuencia de actualización se encuentra en televisores de gama alta que pueden tener 960 Hz y 1200 Hz. Es la frecuencia de actualización más alta que proporciona una experiencia de usuario superior.
¿Cómo puedo saber la frecuencia de actualización de la pantalla de mi TV o PC?
Para conocer la frecuencia de actualización en un monitor de PC, simplemente acceda a la ‘Configuración de pantalla avanzada’. Allí puede obtener la información sobre la cantidad de Hz de su pantalla. Asimismo, dependiendo de tu equipo, es posible que conozcas la frecuencia de actualización o la actualización a través del fabricante de tu tarjeta de video.
En general, todos los monitores y televisores tienen al menos 60 Hz. Asimismo, en el menú del televisor se puede encontrar información sobre la frecuencia de actualización que tiene, así como la posibilidad de cambiarla, según el modelo.
Conocer la tasa de actualización de tu PC o TV te permitirá estar consciente de la calidad que puede ofrecerte. Así, puedes considerar este aspecto para adquirir un monitor que te aportará más claridad y fluidez. Por otro lado, una alta frecuencia de actualización nativa le brindará contenido nítido y consistente.